Mas Tapiolas, mágico hotel con encanto de la Costa Brava

By Enric Ribera Gabandé
 

El complejo hotelero está ubicado en plena naturaleza, en una antigua masía catalana rehabilitada del siglo XIII

El Sallés Hotel & Spa Mas Tapiolas, de Santa Crisrtina d’Aro,  está ubicado en una antigua masía catalana rehabilitada y rodeada  de bellos y tranquilos paisajes, en el apacible Valle de Solius, en la pintoresca Costa Brava, gerundense. Esta masía data del año 1235 y se encuentra rodeada de 90 hectáreas de terreno y vegetación exuberante, convirtiéndose en el año 2000 en un hotel de 53 habitaciones, pasando a ser su edificio principal la masía, y rehabilitándose las 11 habitaciones de la casa.

Mas Tapiolas se alza como una especie de oasis en plena naturaleza. Todo el hotel está rodeado de olivos, pinos del Mediterráneo y alcornocales, y en el cual están distribuidos dentro de las instalaciones un pitch & putt de 18 hoyos, junto a un precioso e incomparable marco de vegetación mediterránea, en el que se respira constantemente la pureza que tiene la naturaleza del lugar, junto con la música ambiental constante del cantar de los pájaros.

Piscina en las suites

Una de las singularidades que distingue a Mas Tapiolas es qué en 5 de las 13 suites del hotel tienen situada en su interior una piscina de 5 metros de largo por 2 de ancho, dotada de unos chorros de agua (jacuzzi), una cascada de agua, una luminosa cromoterapia y un altavoz dentro de la propia piscina para poder escuchar la música que a cada uno más le guste. La piscina está tapada por unos cristales para que no impregnen de excesiva humedad al resto del habitáculo. Las suites restantes, en vez de tener piscina, están dotadas de un jacuzzi doble, muy grande y amplio

Centro de congresos

Mas Tapiolas convive con dos opciones, de las cuales, por una parte, promocionan las familias con 22 habitaciones habilitadas para ellas dentro del edificio Oriol, y 2 en la masía. El resto, es sólo para adultos. También, cuenta con diferentes salas dotadas con tecnología punta para la celebración de congresos, eventos para empresas y familias. Para los niños, hay reservado un espacio exclusivo para ellos, en el qué pueden jugar y divertirse plácidamente. Otro rincón muy íntimo es la sala de lectura, en la que un fuego a tierra dar calor y acogimiento durante los días de frio. En el interior de la masía se distribuyen varios comedores con diferentes capacidades de comensales. En el exterior, se encuentra otro comedor rodeado de cristales y calefactado por 3 estufas en el techo para que los comensales estén en un ambiente agradable de temperatura.

A un tiro de piedra del hotel se encuentra el Valle de Solius, un lugar para realizar magníficas rutas y circuitos de BTT. Mas Tapiolas pone a la disposición de sus clientes, 15 bicicletas, dos bicicletas asistidas (eléctricas) destinadas a realizar algunas de las 8 rutas creadas por el propio hotel.

Mágica gastronomía

Sí mágico es el hotel, mágica es la gastronomía que realiza el Restaurante Mas Tapiolas, de la mano de sus chef, Josep Ayats. El experimentado cocinero da luz, colores, olores y sabores a sus creativos platos que presenta a los comensales. Así encontramos, una terrina de foie micuit; un tataki de atún con aceite de jengibre; una ensalada de sardina macerada y ahumada con verduritas y hortalizas; unos pies con “espardenyes”; un meloso de ternera al romero; un mar y montaña de muslo de pollo de payés; una suprema de rodaballo con puré de zanahoria; y una explosión dulce.
 

Fotografías: Pilar Rius Colom

Foto Nº 1,- Vista panorámica de Mas Tapiolas.   Foto Nº 2,- Comedor para los desayunos.

Foto Nº 3,- Suite con piscina interior.  Foto Nº 4,- Bodegón de platos.

https://elalmanaque.com/Abril19/1-4-19.htm