¿ Qué es la eyaculación precoz?
No es definida del mismo modo por todos los
autores, pero podríamos decir que es la incapacidad de controlar la eyaculación
en el hombre.
Algunos autores afirman que un hombre tiene eyaculación precoz si no resiste
30 segundos (otros ponen el límite entre 30 segundos y 7 minutos) después de
la penetración vaginal.
A la consulta sexológica acuden a veces pacientes que creen no tener
eyaculación precoz, porque nunca eyaculan antes de la penetración. La falta
de control de la eyaculación se convierte en un problema grave cuando el
hombre no resiste por lo menos un tiempo razonable, es decir, lo suficiente
para que la mujer quede satisfecha.
La eyaculación rápida supone una falta de disciplina corporal; en
consecuencia, todo hombre puede conseguir mediante un adiestramiento adecuado
que su eyaculación sea un acto totalmente voluntario.
¿ A qué se debe la eyaculación precoz?
En primer lugar debemos aclarar que la eyaculación precoz, no es una
enfermedad ni algo con lo que algunos hombres han nacido. La causa, no es la
edad, ni la falta de experiencia, ni la mucha excitación sexual o
hipersensibilidad sexual. No se debe tampoco a lago físico, como problemas de
frenillo, de fimosis, de testículos, de próstata, debilidad de un nervio o
sensibilidad en el glande. Las causas de la eyaculación pueden ser muy
variadas, y deberse a falta de información o preparación al iniciar las
relaciones sexuales, al estado de ansiedad o inseguridad originado por otro
problema sexual (como la impotencia), o a la falta de interés en prolongar el
coito, a haberse convertido la eyaculación en un reflejo condicionado, etc.
Por consiguiente, el diagnóstico de la eyaculación precoz no precisa análisis
de orina, de sangre, de semen, ecografías, o inyecciones, ni nada parecido.
¿ Cómo controlar la eyaculación precoz?
Mucha gente piensa que la eyaculación precoz, se pasa con la edad o a medida
que el hombre tiene más experiencia sexual. La realidad es que el hombre que
no controla su eyaculación puede continuar así toda la vida, lo que le puede
crear una gran frustración.
Cada vez que le sucede lo vive con más frustración y ansiedad, lo que
indudablemente influye en la relación con su pareja. Esto es tanto más
lamentable cuanto que la eyaculación precoz tiene solución casi en el 100%
de los casos.
En cuanto al tratamiento, un control perfecto de la eyaculación no se
consigue mediante: consejos, charlas o terapias de grupo, ni con ninguna
inyección, pastilla, medicamento, pomada, cápsulas, esprais, hormonas,
vitaminas o a productos farmacológicos; ni con aparatos o instrumentos
sofisticados. El único tratamiento científico, serio y eficaz de la
eyaculación precoz es a través de un aprendizaje mediante ejercicios y técnicas
muy concretas que debe aprender el hombre, y practicar solo o con su compañera,
si la tiene. Poniéndose para ello en manos de profesionales y clínicas
especializadas.