Buenos días a todos. A los italianos, les gusta mucho la carne fina y
mullida del becerro.
Y cuando uno haya probado un bocado de esta deliciosa preparación,
lentamente cocida, que es el osso-buco, inmediatamente se entiende porqué.
Por eso les propongo esta receta que seguramente va a encantar toda su
familia. Buen provecho, Chris
Ingredientes
para
6 personas
6 rebanadas
de jarrete de becerro
2 cucharadas de harina
3 cebollas
2 dientes de ajo
100 ml de vino blanco
6 tomates
150 ml de caldo de res (o de pollo)
1 ramillete
3 cucharadas de aceite de oliva
2 cucharadas de perejil picado
1 limón
sal, pimienta
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Preparación:
Pelar y
picar las cebollas. Sumergir los tomates 30 segundos en agua hirviendo.
Escurrirlos y pelarlos. Quitar las semillas y cortar la pulpa en
cubitos. Lavar el limón. Y recoger su cáscara con un cuchillo económico.
Salpimentar las rondanas de becerro. Espolvorear la harina sobre los dos
lados, pegando ligeramente para eliminar el excedente. Precalentar el
horno a 200° C (termostato 6/7).
Calentar el aceite de oliva en una olla que puede pasar al horno. Poner
a dorar durante 5 minutos, por cada lado, las rondanas de becerro
enharinadas. Sacarlas de la olla y reservar. En la misma olla, poner a
rehogar las cebollas 5 minutos. Remojar con el vino blanco. Dejar
reducir durante 5 minutos a fuego alto. Luego agregar los tomates.
Regresar las rondanas de becerro. Añadir el caldo. Agregar el
ramillete, el ajo prensado y la cáscara de limón. Cubrir. Enhornar y
dejar cocer 1 hora 30.
Para servir, poner las rondanas en una fuente y reservar en el calor.
Sacar el ramillete y la cáscara de limón y licuar el jugo de cocción.
Verter esta salsa sobre la carne. Decorar el centro de cada rondana con
perejil picado. Acompañar este plato con espagueti o tallarines
frescos.