LA PESETA NO MORIRÁ TAN FÁCILMENTEEstá previsto que en muy pocas semanas dejarán de circular las pesetas; nos habremos desprendido de todos los billetes, y las monedas que nos queden en los bolsillos las guardaremos para las máquinas que aún no han cambiado el sistema. Pero eso no significa que podamos olvidar nuestra antigua moneda, ni mucho menos. Haremos como nuestros abuelos, que cuando se inventó eso de avanzar las horas para ahorrar energía, al dar la hora decían: "las 12 que son las 10", "las 6 que son las 4". Como no se hacían a la idea de la hora oficial, necesitaban decir al mismo tiempo la hora solar.
Ya hemos aprendido a pagar en euros; ha sido relativamente fácil. De aquí a muy poco desaparecerán los precios en pesetas, y quedarán sólo en euros. Pero poco nos dicen en este momento los euros; no nos orientamos sobre el precio real de las cosas, así que tenemos que traducir por nuestra cuenta a pesetas para saber si lo que nos venden es caro o barato. Los más jóvenes se acostumbrarán pronto a valorar en euros, pero los mayores seguirán mucho tiempo traduciendo a pesetas.
Ejercicio. Compara los precios de los productos más habituales , un café, el diario, un paquete de tabaco antes y después de la entrada del euro. ¿ Han subido o se mantienen?