MUNDIAL 2002
SE ACABO EL MALEFICIO PARA
ESPAÑA
La selección española de
fútbol acabó hoy con el maleficio que le perseguía
desde hace 52 años y, por fin, pudo vencer en el
partido inicial de su grupo en una Copa Mundial.
Ante 42.880 espectadores
congregados en el estadio surcoreano de Gwangju,
España derrotó, dentro del grupo B, por 3-1 a
Eslovenia y se colocó líder, ya que Paraguay y
Sudáfrica, los otros dos integrantes, empataron 2-2.
Este empate le sirve
mucho a España porque le otorga una buena ventaja
inicial de dos puntos sobre ellos. Los "guaraníes"
desperdiciaron un 2-0 de ventaja y un autogol y un
penalty le impidieron un triunfo que tenían bien
diseñado y semiasegurado. Pero en el fútbol sólo el
pitido final es el que determina quien gana, pierde
o empata.
No fue un partido
brillantemente jugado por España, aunque
individualmente lució más capacidad que su débil
adversario, que distó mucho de ofrecer las
exquisitas características y calidad del fútbol
yugoslavo.
España jugó a ráfagas,
con una brillante actuación de Javier de Pedro,
incansable en todo el partido, la oportunidad y el
"saber estar" de Raúl, y la recuperación de la
calidad de Baraja, y sobre todo Valerón, en el
segundo periodo.
Los eslovenos, que
comenzaron presionando el medio campo español, lo
que impidió que Valerón y Baraja pudieran cumplir
con acierto su papel de "organizadores", terminaron
por abandonar esa táctica cuando después de tres
ataques de contragolpe en los minutos 25 y 26, todos
frustrados, se replegaron hacia su zona defensiva,
lo que permitió a España tener una mayor capacidad
de manio bra por contar con un terreno más amplio
para la elaboración de las jugadas..
Raúl y de Pedro bajaron
mucho hacia la zona de los mediocampistas para hacer
el enlace y acabar con esos pases largos e
imprecisos que salían, generalmente desde su
defensa, lanzados por Hierro y Nadal,
principalmente.
La selección española en
una acción ya sobre la agonía del primer tiempo
obtuvo a través de Raúl el gol que le abrió el
camino de la victoria a los 43 minutos, gracias a
una acción de Luis Enrique, que fue uno de los que
peor jugaron, y a un deficiente rechazo del central
Galic, que Raúl recuperó con su "fino olfato" de
gol.
España mantuvo el
predominio de la posesión del balón con un 60 por
ciento ante el 40 de Eslovenia, y en el segundo
periodo su sistema táctico -4-4-1-1-, que a veces
fue de 4-5-1 porque Raúl se retrasaba para servir de
"enlace", empezó a funcionar con más solidez,
destruyendo el centro del campo esloveno.
Para Valerón y Baraja fue
muy gratificante la "alianza" que establecieron con
la generosidad de Raúl y eso unido al buen juego de
De Pedro hizo astillas la táctica parsimoniosa de
Eslovenia que cada vez se fue retrasando más, para
formar una barrera de hasta seis hombres en su área.
La salida de Zahovic, le restó ideas, pues Acimovic,
su sucesor, aunque se desplazó más hacias las
puntas, muchas veces abusó del individualismo para
invalidar las penetraciones favorables de algunos de
sus compañeros en la zona de Casillas.
Los españoles, poco a
poco, fueron haciéndose fuertes en su medio campo y
desde allí elaboraron jugadas precisas, las que
tuvieron mejor culminación cuando Morientes remplazó
a un desacertado Tristán y entonces los espacios
defensivos eslovacos se abrieron y una jugada bien
elaborada por Morientes y de Pablo originó un pase
preciso a Valerón, que penetró sin marca por el
extremo derecho y venció sin problemas al portero
Simeunovic.
Este gol a los 76 minutos
y el ingreso de Helguera por el desacertado Luis
Enrique para oxigenar la zona del medio campo y
permitir a Valerón sus movimientos sin la atadura de
"organizador pleno" le dieron a España otra imagen
que, por desidia, estuvo a punto de frustrar, cuando
una gran jugada de Acimovic y una "pared" con
Cimirotic, que inexplicablemente no atinaron a
cortar Hierro y Nadal, originó el gol esloveno, a
los 81 minutos.
Una entrada con posible
infracción de Nadal en su propia área, que el
árbitro marroquí Mohamed Guezzaz no sancionó, a
los 83 minutos, dio paso al tercer tanto español,
cuando Morientes, dos minutos después, desplazado
hacia el costado izquierdo penetró en el área rival
y Gatser cometió penalty, que cobrado por el máximo
goleador de la selección, Fernando Hierro, fijó el
claro y merecido 3-1.
Así España, que jugó
mejor, pero que debe mostrar una mejor imagen en sus
dos nuevos partidos, recuperó el espíritu victorioso
que le acompañó en 1950 para ganar su primer
partido. Los tres puntos en liza ya están en su
activo y eso, aunque no se crea, estimula el
"apetito futbolístico" para seguir afrontando con
éxito la XVII Copa Mundial de la Fifa.
En el Grupo F, el gran
favorito Argentina, se deshizo de uno de los rivales
más temibles, Nigeria, a la que venció 1-0 con gol
de Batistuta. Mostró buenas maneras, un equipo bien
plantado en el terreno y unos jugadores que unieron
su capacidad y técnica para alcanzar un triunfo que,
aunque corto, les sirve para encaminar el camino
hacia el título.
Inglaterra y Suecia, los
otros dos seleccionados del grupo, empataron a un
gol, pero su juego no se pareció al práctico y
acoplado de los "gauchos".
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