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Hernia
discal.
La
hernia discal es una dolencia muy frecuente que a menudo lleva
al enfermo al quirófano. Hasta la fecha las hernias discales
de gran tamaño, que son la mayoría, precisaban para su
solución de cirugía abierta. Las técnicas poco invasivas
existentes se hallan indicadas sólo para casos de hernias de
pequeño tamaño. Pero esto puede cambiar con una nueva técnica
quirúrgica, la Disectomía Endoscópica.
Oímos
hablar muchas veces de hernia discal pero, ¿qué es
exactamente? Técnicamente la podemos definir como la protusión
o salida del núcleo pulposo de un disco intervertebral.
¿Qué
aporta de nuevo esta técnica? De entrada y para ver las
grandes ventajas de ésta, podemos decir que gracias a ella,
se pueden operar hernias de gran tamaño con una mínima
invasión, anestesia local y entre 24 y 48 horas de
hospitalización. Tanto la técnica como la instrumentación
se las debemos al cirujano francés Jean Destandau.
La
Disectomía Endoscópica tan solo precisa de una incisión de
entre 10 a 15 mm y el seguimiento de la operación se realiza
a través de la imagen proyectada en una pantalla de televisión
gracias a una diminuta cámara de 4mm de diámetro introducida
en la zona del disco intervenido. La cámara se introduce en
el organismo gracias al espéculo, un instrumento con forma de
embudo de unos 10mm que tiene cuatro pequeños orificios, uno
para la cámara y el punto de luz que ésta necesita y otros
tres para el desarrollo de la intervención. Esto de por sí,
ya es un gran avance, pues la cirugía convencional precisa de
ente 6 a 10 centímetros para acceder al disco herniado.
Estéticamente,
esta nueva técnica, también tiene ventajas frente a la cirugía
habitual, ya que la cicatriz es mucho menor. Además el
postoperatorio es menos doloroso y la recuperación es más rápida,
pasando de unos 7 días de hospitalización tradicionales, a 1
o 2 ahora.
Por
todo esto y más, nos hacemos eco de aquella antigua canción
que decía: "es que las ciencias avanzan una
barbaridad".
Material cortesia de Fondotema.org
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