EL ALMANAQUE ECOLÓGICO 

Uno de los temas que hoy apasionan profundamente es la ecología; y crecerá aún más esta pasión a raíz de la huelga de salud a muerte que están protagonizando las vacas en Europa, en la que mañana pueden tomar el relevo las gallinas, y pasado mañana los cerdos, y al otro los peces. A lo largo del siglo que estamos estrenando, sufriremos en nuestras carnes y en nuestras faltriqueras zarpazos más serios aún que los de las vacas locas, el uranio empobrecido y el plutonio en todo su esplendor. Al final tendremos que tomarnos en serio y resolver los más graves problemas ecológicos que estamos generando por egoísmo generacional, al igual que Europa tuvo que afrontar los graves problemas higiénicos que ocasionaban las terribles pestes que asolaban las ciudades; al igual que los londinenses tuvieron que espabilarse para de limpiar el Támesis y depurar la atmósfera caliginosa que envolvía la ciudad.
 Nuestros hijos y nuestros nietos tendrán que afrontar definitivamente las dos grandes tareas pendientes en defensa del planeta: la primera, sustituir las actividades contaminantes por otras limpias, no importa a qué precio. La segunda, eliminar o reconvertir a como dé lugar las cantidades ingentes de basura lanzadas en estos dos últimos siglos a las aguas, a la tierra y a la atmósfera, con ciclos de degradación tan dilatados, que en la práctica hay que considerar como basuras indestructibles. Tendrán que plantearse, incluso, con absoluta seriedad, el factor degradante de la especie humana, y los límites de los que ésta no ha de pasar para no hundir el barco por haberlo cargado con un número de pasajeros excesivo a todas luces. Será improrrogable dar respuesta a lo largo del siglo XXI al calentamiento progresivo del planeta por efecto de la actividad humana; habrá que fabricar ozono y bombearlo para tapar el agujero que tan irresponsablemente hemos hecho y seguimos agrandando. Habrá que plantearse en serio la regeneración del pulmón del planeta, que la agricultura, la industria, el urbanismo, el turismo y las obras públicas, no cesan de reducir año tras año. 
Muchas cosas van a tener que cambiar a lo largo del siglo recién estrenado, para no arriesgar la estabilidad climática y biológica del planeta. Las inquietudes ecológicas calarán cada vez más hondo, hasta que por fin pasen a guiar nuestra conducta, la de nuestros hijos y la de nuestros nietos. No hemos de descartar la hipótesis de una nueva ética e incluso de un nuevo culto religioso folklórico que tenga como principal fuente de inspiración y referente, la naturaleza; que cerremos un ciclo religioso volviendo, por sublimación, a una nueva especie de animismo y panteísmo que nos devuelva a las formás de religión más primitivas. Por eso es previsible que crezca de forma exponencial el interés por conocer la Naturaleza en todos sus aspectos y en toda su extensión.

 Entre los focos de interés que se están creando para constituirse en contenidos primordiales de los medios de comunicación, éste será uno de los estelares a lo largo del siglo XXI. La manifestación de este fenómeno es inequívoca: desde que empezó a despuntar en la segunda mitad del siglo pasado el interés por la naturaleza, no ha sufrido el menor retroceso; lo cual indica que que al movimiento ecologista le queda por hacer aún la mayor parte de su recorrido. Es esta visión, que tiene visos de certidumbre, y nuestro reto de no renunciar a ninguna área del lenguaje, aunque por ser los lexicólogos gente de letras se nos ponga cuesta arriba; es esa convicción la que nos ha movido a entrar con decisión en el mundo de la ecología, afrontada desde todas sus vertientes: la del estudio de la estructura de la naturaleza, tanto inanimada como animada; la del estudio del cosmos, el de la zoología, incluida la humana; el de la botánica... Son todos ellos filones de palabras y de conceptos que hemos abierto y que pensamos proseguir los sábados. Con los materiales que hemos acumulado hasta el presente en estas materias, nuestro webmáster ha compuesto el ALMANAQUE ECOLÓGICO, para ofrecer juntos todos los materiales homogéneos. Es la fórmula que hemos considerado más idónea para presentar los fondos de nuestra web clasificados por temas.   

Mariano Arnal

 

Inicio  |  Calendarios  | Presentación  |  Calendario Ecológico